Solidaridad en Salamanca contra la represión de El corte inglés

Una veintena de personas se concentra a las puertas del centro comercial charro para exigir a la empresa la retirada de las denuncias a anarcosindicalistas.

CORTE INGLÉS SIGUE DENUNCIANDO A SINDICALISTAS EN BARCELONA

La empresa exige el pago de 8500 euros en concepto de responsabilidad civil y cinco años de cárcel a varias personas, uno de ellos militante de la CNT-AIT de Barcelona, por su participación en la huelga general de marzo de 2012. Nuestro compañero está acusado de daños y desórdenes públicos.

El pasado 28 de diciembre, otros dos miembros de la CNT-AIT de Barcelona eran detenidos por su participación en la campaña de boicot a esta infame empresa, acusados de obstrucción a la justicia, desórdenes públicos y extorsión.

No olvidemos que el actual presidente y máximo responsable de El Corte Inglés, Dimas Gimeno, formó parte hasta el año 2000 de la cúpula de Falange Española Independiente. Se trata de un partido político fascista junto al que Dimas llegó a presentarse a las elecciones al Congreso de los Diputados.

El presidente falangista y sus cuadros directivos cuentan con el apoyo de sindicatos amarillos que colaboran abiertamente con la compañía, FASGA y FETICO, y que sirven para contener el descontento de las trabajadoras y trabajadores explotados.

Grupo El Corte Inglés es miembro destacado de la organización patronal ANGED, cuya presión ha desembocado en la progresiva liberalización de los horarios del comercio. Esto ha supuesto la implantación de jornadas laborales cada vez más abusivas junto al hundimiento de pequeños comercios.

La empresa también hace gala de un rancio machismo. Destaca el escándalo que supuso hace un año la comercialización de ropa para bebés con los eslóganes “Bonita como mamá” (en color rosa) e “Inteligente como papá” (en azul).

También es habitual la práctica de la cesión ilegal de trabajadores y trabajadoras. Otro afiliado de la CNT-AIT fue despedido en Madrid en 2014 por denunciar el tráfico de mano de obra a IECISA, la división de informática del grupo empresarial.

Para colmo, el edificio de El corte inglés de Salamanca se asienta en un terreno público otorgado irregularmente por el ayuntamiento del Tormes en una chapucera maniobra de corrupción, condenada por el Tribunal Supremo en 2014.

Todo esto es sólo la punta del iceberg de los trapos sucios de una empresa podrida hasta la médula, que sin duda es lesiva para los intereses de toda la clase trabajadora.

NO CONSUMAS SUS PRODUCTOS