Organizado por la CNT de Salamanca y el CSA Villafría, tuvo lugar la actuación en la plaza del barrio Vidal en apoyo a la lucha por la libertad de expresión.
Hace unos días la Audiencia Nacional archivaba definitivamente la causa contra los titiriteros por enaltecimiento del terrorismo por la representación, de todos conocida de la obra “La bruja y don Cristobal”.
Queda demostrado que no se pudo cometer delito por el carácter ficticio de los hechos. La pesadilla no ha terminado ya que sigue pendiente la causa de incitación al odio.Comportamientos cuestionados al ser cometidos por personajes fantásticos.
Un nutrido grupo de gente de toda edad y condición asistió a la representación. Una adaptación de varios cuentos infantiles como: El panadero y el diablo, El propietario y la narración del cuento La sopa de piedras valorando el apoyo mutuo y la solidaridad entre los que poco o nada tienen.
Significativo el apoyo unánime de niños y mayores a uno de los personajes que se negaba a salir a escena por miedo a ser “acusado” y “encarcelado” por algún supuesto delito maquinado por la mente de algún juez.
Personajes de guiñol simples pero a la vez llenos de crítica y de idealismo. El teatro de guiñol, a veces puede compararse con lo que se decía del Quijote “es el libro que hace reír a los niños, pensar a los jóvenes y llorar a los viejos”.
Juntos, niños, jóvenes, y viejos pudimos disfrutar de un trozo de felicidad. Gracias Raúl y Alfonso, gracias titiriteros por esos momentos para soñar y ver que todas tenemos escondido algo bueno. Lo importante es encontrarlo.
“El bien más preciado es la libertad” dice una estrofa de A las barricadas.
Volad, vosotros sois libres a pesar de las cadenas porque vuestra imaginación y la ilusión que transmitís no las pueden retener ni los muros ni las rejas de la intransigencia.
¡Salud compañeros!
¡Viva la solidaridad y la cultura popular!