Varias compañeras de la CNT-AIT se desplazaban durante la tarde del 13 de agosto al centro de trabajo de Arvato-Qualytel en Salamanca. Allí se repartían más de 500 octavillas informando del conflicto sindical iniciado por trabajadoras de la empresa. El reparto coincidía con la visita de la directiva de Orange, cliente mayoritario de Arvato-Qualytel en Salamanca, que no se sorprendían al conocer la triste precariedad que viven las trabajadoras que prestan sus servicios.
Arvato-Qualytel destruye empleo estable al cubrir puestos de trabajo ordinarios con contratos temporales. Así mantienen a un buen puñado de personas en la más absoluta precariedad. Centenares de trabajadoras y trabajadores se rigen por el convenio de empresas de trabajo temporal, en lugar del de “contact center”.
Esto significa que no disfrutan de vacaciones, tienen menos días de permiso, y por supuesto no tienen ningún derecho a indemnización por despido. Y eso aunque tengan garantizado estar en el paro al menos 6 meses (y un día) cada dos años para no tener que pasarlos a contrato indefinido. La inspección de trabajo ha certificado lo evidente, declarando en varias ocasiones que estos contratos temporales se realizan “en fraude de ley”.
La CNT-AIT de Salamanca ha comenzado una campaña contra esta estafa manifiesta, y ha denunciado pública y judicialmente este atropello. Pese a estar citada el pasado 5 de agosto, la empresa no ha hecho acto de presencia, por lo que tendrá que ir a juicio.
No estamos pidiendo la luna, sino unas condiciones dignas. Si tú también piensas que no puedes tragar ni un día más, ya sabes dónde estamos. En la CNT-AIT nadie cobra un duro. No tenemos liberados ni recibimos ni una sola subvención. No nos presentamos a ningunas elecciones. Somos sólo trabajadoras y trabajadores organizadas entre iguales para defendernos.