Banco Popular pretende desahuciar a Raúl de su casa. La “solución” que ofrece el banco es conceder un nuevo crédito sobre la deuda restante tanto a Raúl como a su ex pareja, también hipotecada, en el que deberían poner de avales a los padres de ambos, entrampando a más gente aún y poniendo dos nuevas casas en la cuerda floja. El banco lo ofrece sabiendo que no podrían pagarlo, puesto que sería un crédito sobre otro crédito.
La deuda que se supone que mantiene Raúl se debe a que la tasación del piso que hizo el banco en el momento de compra fue mucho mayor de la que realizó en el momento de embargo. Vendieron un duro a diez pesetas y ahora dicen que vale una.
Raúl ni tan siquiera está exigiendo quedarse con un piso que no puede pagar. Ha intentado acogerse a la dación en pago. Pero para el Banco Popular no parece ser un chollo suficiente quedarse con una casa por tan sólo 1 6.000€, que es la pequeña parte de deuda restante.
Debido a que el Banco Popular se ha negado a negociar una solución a este problema, la CNT de Salamanca y STOP Desahucios han decidido apoyar al compañero Raúl y presionar al banco hasta que acepte una salida razonable a este problema.