El Sindicato de Oficios Varios de Salamanca (CNT-AIT) realizó el viernes 13 de Enero, desde las 18.30, una concentración de apoyo en el consulado francés a los tres compañeros encausados por la «Justicia» francesa.
En la tarde del viernes 13 de Enero, y durante casi una hora, cerca de quince compañer 2s del Sindicato de Oficios Varios de Salamanca (CNT-AIT) se concentraron a las puertas del consulado francés en Salamanca (Avenida de Portugal, 106). La concentración servía para informar a los transeúntes del caso conocido como «los 3 de Niza», para presionar al Gobierno francés a absolver a los tres compañeros y, del mismo modo, para mostrar nuestro apoyo y ánimo a los compañeros.
Como ya hemos informado en la web, los tres compañeros fueron detenidos el 1 de Noviembre mientras se dirigían a una manifestación coincidiendo con una reunión del G-20. Allí pretendían mostrar su repulsa a las medidas económicas que se están realizando en toda Europa y a la presión que los mercados están ejerciendo contra los Gobiernos para reducir los derechos laborales y sociales. Además, los compañeros querían aprovechar el viaje para realizar alpinismo en los Alpes.
Por todo ello, llevaban material de propaganda y material de escalada: camprones, piolets… Todo este material ha sido utilizado por la «Justicia» francesa para acusarles de terrorismo. Los compañeros han denunciado la fragilidad de las pruebas aportadas, pues se les ha acusado de tenencia de armas de sexto grado, que es cualquier material que pueda ser utilizado de forma violenta, es decir lo mismo sirve un piolet que un teléfono móvil. Del mismo modo se ha denunciado el anormal desarrollo de los juicios, pues se han utilizado traductores que no se ajustaban a lo que los compañeros decían en los juicios.
El 30 de Noviembre se celebró un juicio en el que los compañeros, tras un mes de estar encerrados, salieron en libertad provisional. Pero será el lunes, 16 de Enero, cuando se conozca la sentencia definitiva. Si bien la fiscalía no ha pedido más pena, ha pedido que se tenga en cuenta su acusación de «pertenencia a grupo violento» como expuso en el primer juicio con «pruebas» como literatura anarquista, camisetas negras o afiliación a sindicatos legales (CNT).